Crítica: Piratas del Caribe 4

Debo confesar, desde aquí mismo, en este momento, que nunca he visto una sola pelicula (completa) de la saga de los Piratas caribeños. Pero bueno, finalmente decidí que vería una. Y la vi, en el cine, sala V.I.P. (que está super comoda, por cierto, pero ese es otro cuento), y decidí que posiblemente debería darle una oportunidad a las demás entregas.

El argumento: Se resume fácil. Jack Sparrow vuelve a las andadas, esta vez buscando la mítica fuente de la juventud. Pero en su camino encontrará varios peligros (tanto humanos como sobrenaturales), aunque al menos contará con la ayuda de una hermosa española que se tiene entre manos varios planes que incluyen tanto a Jack como a su padre (de ella), el lejendario capitán pirata Barbanegra.

La visión general: Decir que es divertida es quedarse corto. La verdad estamos ante una película que puede tener muchos fallos, que puede llegar a ser algo absurda y repetitiva, y que no inova en ningún aspecto en ningún momento. Pero... ¡que importa! La pelicula cumple. Nos hace entretenernos durante todas las más de dos horas de duración, nos hace reir por momentos, y nos hace disfrutar de las peripecias de Jack y su banda de maleantes disfrazados. Lo único a lamentar, en todo caso, es que parecen quedarse cortos en algunas historias, sobre todo lo referente a los navios españoles y el misionero que va a bordo del barco pirata.

Las actuaciones: Jonhy Depp cumple. Tal vez un poco exagerado, pero cumple. Afeminado por momentos (como bien hace ver Penelope cuando dice "eres el único pirata por el que me podía hacer pasar"), pero de cierta forma le queda. Penelope Cruz tambien está bien, da risa en un papel que pasa del amor al odio, y que explota una chispa bipolar que se ve abrumada por lo manipulador que puede ser ("te mentí contandote la verdad"). Aunque el personaje le queda, y en ningun momento queda fuera de lugar. Igualmente Barbanegra (Ian McShane) y Barbossa (Geoffrey Rush) cumplen con el cometido, aunque se notan personajes planos y vacíos. Por cierto, que a este ultimo, no le puede reconocer hasta ver los créditos. De allí en fuera no hay que destacar. El joven misionero, guapo, si, pero no tiene sentido en la historia. Cumple, pero siempre sale sobrando si no fuera por el aspecto "religioso" de la cinta.

El guión: Por lo menos predecible. Crea algunas lineas absurdas (¿Angelina hija de Barbanegra? ¿En serio?), pero en general entra en lo aceptable. No es una obra maestra, pero la debilidad del producto general está compensada por unas escenas muy buenas, divertidad y dignas de mención. Sobre todo ciertos diálogos, ciertas pláticas, ciertas artimañas del personaje de Penélope Cruz, son lo que salvan este apartado.

Lo técnico: ¿Tengo que decirlo? ¡AQUI SE LUCE! Los efectos están casi perfectos, aunque por culpa de guión o edición se encuentren bastante desperdiciados (las sirenas daban para mucho más, sin duda alguna). La música está muy buena, ideal para la pelicula. La dirección artística resulta una delicia cuando se trata de barcos, de selvas, de España e Ingleterra... pero sin embargo falla bastante cuando hablamos de la fuente de la juventud, punto clave de la película que acaba quedando demasiado simple, demasiado olvidable, como si el presupuesto se hubiera acabado entre tantos barcos explotados. El vestuario bien, bueno para lo que pide, pero ya no sorprende trás 3 películas viendo lo mismo.

La conclusión: ¿Notaron que está película era más religiosa que las anteriores? Porque eso parecen decir todos... Dejando eso a un lado, quiero decir que llegué a la conclusión de que la película es una buena opción para ir al cine, aún más porque siento que mucho del apartado impresionante se perderá en el DVD (vi Avatar en la tele, despues de maravillarme en el cine, y resulta aburrida, espero que aquí no pase lo mismo). La película, al final, solo puede ser definida con una palabra. Entretenida.

Calificación final: 7.0 (Decente)