Una semana de clases y comienzo exámenes finales. Que felicidad la mía, a punto de acabar curso: realmente no puedo esperar para salir. Pero mientras ese ansiado momento llega a mi, vamos a seguir aquí distrayéndonos un rato. Hoy, una película encantadoramente simple, familiar... y con mi adorada Streep.
El Argumento: "Cuando una recia neoyorquina se entera de que su madre padece de cáncer, renuncia a su empleo, termina con su novio y regresa a vivir con sus padres para dar una mano". Eso es lo que Netflix nos dice, pero personalmente se queda corto. Aunque sirve.
¿Por qué me ha gustado? Hay tantas cosas que me han gustado sobre esta película, comenzando por tener una historia que se me ha hecho tan humana (la mayor parte). Desde mi perspectiva, los personajes resultan coherentes, reales; te identificas con ellos, sufres con ellos, te conmueves cuando vez todo lo que les pasa. La película está plagada de geniales personajes, geniales escenas (momentos tan pequeños, que van aumentando en significado como la película progresa, se vuelven inolvidables) y geniales actores. Streep tiene un papel que es imposible no amar, Zellweger da realidad y complejidad a una protagonista que evoluciona y aprende, y Hunt defiende de forma genial un papel indefendible (en serio, que hay que ser hijo de puta para engañar a la esposa enferma, y luego querer echarle la culpa a la hija). Esta es una película que no necesita grandes cosas para brillar, porque brilla precisamente por su historia simple, sencilla, que llega al corazón y se queda allí.
La Escena: A mi, personalmente, hay unas cuantas que se me quedan grabadas. En este momento, recuerdo a la madre, en la tina atrapada, delgada y rota. Recuerdo a ella sentada, y su esposo llegando con músicos, chefs y meseros para darle una última cena romántica. Recuerdo a las amigas rodeándola cuando ella ya de la cama no puede levantarse. Recuerdo cuando pide ayuda con su suicidio. Recuerdo las escenas finales del funeral. Y recuerdo el nudo que se me ha quedado en la boca.
Lo Mejor: Hay dos actrices que brillan como ellas solas pueden brillar: Zellweger y Streep, que en ese orden, porque por más que la que recibió premios sea la veterana, esta es al final una secundaria para la joven promesa (en aquel entonces) que se roba la película, y que carga en sus hombros el peso de una historia demasiado profunda para ser expresada con palabras; Zellweger es una gran actriz, que nadie me lo niegue. Y si hubieran patrocinado a Streep como secundaria (como debería haber sido), quizás ambas hubieren obtenido la nominación al Oscar.
Lo Peor: Para mi lo peor de la historia son las pequeñas subtramas fueras del enredo central (ya saben, todo sobre el novio, el hijo, los amigos) que, a pesar de enriquecer enormemente la historia y la complejidad de los personajes, al final quedan algo diluidas, fuera de lugar. No tenemos final para ellos, lo que es triste e innecesario.
A Modo de Cierre... Las películas sobre el Cáncer, bien hechas, son siempre efectivas, memorables. Una historia con un buen guión brilla a pesar de todo. Una película con un genial reparto suele funcionar. Aquí encontramos todo. Como siempre, acabar diciendo que no es una obra maestra, pero tampoco pretende serlo: un film simple, de tarde de domingo, que nos recuerda sobre las cosas que realmente importan en esta vida.
Calificación: 8.0 (Buena)
No hay comentarios:
Publicar un comentario